Siete regiones de Chile, incluida la Región Metropolitana, se encuentran en alerta sanitaria debido a un aumento en los casos de esta enfermedad transmitida por el mosquito Aedes aegypti. La situación ha llevado a las autoridades a tomar medidas urgentes para controlar la propagación del virus y proteger la salud de la población. Por esta razón, en el marco del Día Internacional contra el Dengue que se conmemoró este 26 de agosto, especialistas de la Universidad de Chile explican las causas de este fenómeno.
l dengue, una enfermedad viral transmitida por el mosquito Aedes aegypti, ha afectado a diversas regiones de Chile en los últimos meses. Según el Ministerio de Salud, se ha registrado un incremento en los casos en comparación con años anteriores, lo que ha llevado a declarar la alerta sanitaria en gran parte de país, la que estará vigente hasta el 31 de diciembre de 2023: Arica y Parinacota, Tarapacá, Antofagasta, Atacama, Coquimbo, Valparaíso y la Metropolitana de Santiago.
El profesor Mauricio Canals, académico del Programa de Salud Ambiental de la Escuela de Salud Pública de la Universidad de Chile, advierte que «en la zona norte del país, en particular, hay mucho intercambio con países que tienen dengue. En Arica, han llegado aproximadamente 12 casos de dengue en los primeros seis meses del año». Plantea, asimismo, que este es un asunto de consideración, dado que no existe cura para este mal. «Esta no es una enfermedad que pueda ser tratada, sino que sencillamente se trata en forma sintomática. El papel fundamental de la salud pública es en el control de los vectores del dengue. En Chile se hace un estudio permanente –en particular en la zona norte del país– donde se muestrean los cuerpos de agua para ver la presencia del Aedes aegypti”, afirma.
Las altas temperaturas que trae el cambio climático y la humedad favorecen la reproducción de los mosquitos hembra de esta especie transmisora del virus. Los síntomas del dengue incluyen fiebre alta, dolor de cabeza intenso, dolores musculares y articulares, así como erupciones cutáneas. En casos graves, la enfermedad puede evolucionar hacia el dengue grave, una forma más peligrosa que puede poner en riesgo la vida del paciente.
Fernando Fredes Martínez, académico de la Unidad de Enfermedades Parasitarias del Departamento de Medicina Preventiva Animal de la Facultad de Ciencias Veterinarias y Pecuarias (FAVET) de la Universidad de Chile, dice que es importante relevar que el Aedes aegypti también puede ser vector de los virus de otras graves enfermedades que afectan al ser humano. “El dengue es una enfermedad viral que se transmite naturalmente por mosquitos hembra de la especie Aedes, siendo Aedes aegypti su principal vector. Pero también puede transmitir importantes enfermedades como la fiebre amarilla, el del zika y el del chikungunya”, dice. Por otra parte, sostiene que “en un país como el nuestro, que está rodeado de países vecinos que tienen el vector y además dengue, es importante realizar vigilancia de los mosquitos presentes en aquellas zonas fronterizas, aeropuertos y puertos”.
En cuanto a la incidencia del cambio climático, el profesor Fredes indica que es una variable importante. “El cambio climático es relevante y puede tener una gran influencia en la propagación del dengue, ya que permitiría que el mosquito colonice sectores del mundo en que el aumento de las precipitaciones y de las temperaturas medias pueden generar las condiciones ideales para que el vector se pueda criar y reproducir en lugares donde antes no lo lograba”, explica.
El monitoreo es desarrollado, entre otros profesionales, por médicos(as) veterinarios(as) de la SEREMI de Salud y del Instituto de Salud Pública (ISP), a través de un programa de vigilancia y control de mosquitos de importancia sanitaria en Chile del Ministerio de Salud. Las autoridades de salud, asimismo, han implementado una serie de medidas preventivas para controlar la propagación del virus. Estas incluyen campañas de concientización para informar a la población sobre las formas de prevenir la picadura de mosquitos, eliminando posibles criaderos en sus hogares, y utilizando repelente y ropa protectora. Asimismo, se han intensificado las labores de fumigación en áreas identificadas como focos de contagio.
Con motivo del Día Internacional contra el Dengue, que se conmemora este sábado 26 de agosto, se organizarán diversas actividades a nivel nacional para sensibilizar a la población sobre la importancia de prevenir esta enfermedad. Expertos en salud advierten que la colaboración de la comunidad es fundamental para enfrentar esta problemática, y hacen un llamado a seguir las indicaciones de prevención y cuidado emitidas por las autoridades sanitarias.
Autocuidado: alejarse de las pozas de agua
Para prevenir la transmisión de esta enfermedad vectorial, es necesario evitar la proliferación de los mosquitos vectores. Para esto, se podrían practicar algunas medidas que tienen relación con dificultar el ciclo de vida del mosquito, como son vaciar, cubrir o eliminar recipientes donde exista agua almacenada, limpia o sucia, que es requerida para la oviposición de las hembras.
Otro tipo de medidas, es que las personas que habiten o visiten sectores donde exista el vector tomen medidas de protección personal, como son la utilización de mosquiteros en puertas y ventanas, e idealmente y cuando sea posible mantener lugares cerrados con bajas temperaturas utilizando equipos de aire acondicionado. También se aconseja el uso de ropas que cubran la mayor parte del cuerpo y que en las partes expuestas se pueden utilizar repelentes de mosquitos. “Un dato interesante es indicar que el mosquito involucrado pica con mayor frecuencia durante el día y que prevalece y se propaga rápidamente en países o regiones del mundo que posean clima tropical o subtropical”, asegura Fredes.
El profesor Canals, en tanto, señala que “hay que evitar los cuerpos de agua. Por ejemplo, en Rapa Nui se dejan muchos neumáticos al aire libre y estos cuando llueve se llenan de agua y ahí los mosquitos ponen sus huevos y hay crianza de estos. Los huevos del Aedes aegypti son de color oscuro, muy pequeñitos, y se adhieren, por ejemplo, a las vastas de los Blue Jeans. Por ejemplo, si las personas van a Isla de Pascua y se meten en charcos de agua, podrían quedar adheridos huevos de mosquito en la ropa”, advierte.
Estrategia de Wolbachia en Estados Unidos
La estrategia de la Wolbachia es un tipo de control biológico del dengue, que es regulado por la Agencia de Protección Ambiental de los Estados Unidos (EPA). Consiste en introducir la bacteria Wolbachia, muy común en varios insectos de todo el mundo, en los huevos de Aedes aegypti. Si los machos portan la bacteria, se aparearán con mosquitos hembras silvestres (que son las chupadoras de sangre y vectores de dengue) que no tienen Wolbachia y las hembras pondrán huevos sin crías. A través de este método, que libera sistemáticamente machos con la bacteria en una zona geográfica, se logra reducir la cantidad de mosquitos Aedes aegypti.
“La EPA ha registrado mosquitos con Wolbachia para evaluar su eficacia en la reducción de las cantidades de mosquitos Ae. aegypti y no otros tipos de mosquitos. Es considerado una medida alternativa de control avalada por las entidades de salud gubernamentales de Estados Unidos, ya que en zonas con altos niveles de Wolbachia no se evidencia transmisión del dengue”, comenta el profesor Fredes.
Mauricio Canals, por su parte, dice que es una idea viable en países con altos índices de la enfermedad. «Si uno estudia lo que ha dicho la Organización Mundial de la Salud y lo que ha dicho la OPS en relación a Wolbachia, se está viendo con buenos ojos esta estrategia. Se ve como una estrategia viable”.
En un esfuerzo conjunto entre el gobierno, el sector salud y la ciudadanía, Chile busca hacer frente a esta situación epidemiológica y reducir la incidencia del dengue en el país. Los especialistas enfatizan que el compromiso de todos y todas es esencial para evitar la propagación de la enfermedad y proteger la salud de la población vulnerable.
Carolina Aliaga
Prensa Uchile