Carmen Berenguer, Nadia Prado, Daniela Catrileo, Manuel Silva Acevedo, Rosabetty Muñoz, Jaime Huenún y Raúl Zurita, entre otros poetas nacionales, participaron en este encuentro intergeneracional realizado en el Salón de Honor de la Casa Central de la Universidad de Chile. Por medio de sus versos, las y los escritores rememoraron y reflexionaron en torno a los dolores y tragedias que dejó la dictadura y las cicatrices de este período a 50 años del quiebre democrático.
“Septiembre es un mes muy difícil para pasarlo en soledad». Esta fue una de las expresiones que ocupó la poeta, egresada y académica U. de Chile, Mirka Arriagada, para describir a esta época que recuerda uno de los momentos más aciagos en la historia del país. «Soledad», “muertos”, “terror”, “balas”, “verdad” y «justicia» fueron algunos de los conceptos que articularon los múltiples recuerdos y reflexiones que dieron vida al emotivo recital poético que la Universidad de Chile ofreció a la comunidad este lunes 4 de septiembre, en el marco de la semana por el «Nunca Más».
A través de la voz, destacadas y destacados poetas nacionales de diferentes generaciones compartieron parte de sus obras, algunas inéditas, otras en proceso de edición e imprenta. La instancia buscó abrir espacio a la cultura en la conmemoración de los 50 años del golpe de Estado, así como incentivar la reflexión y poner palabras al dolor, para repasar en conjunto los sentires de quienes vivieron, sobrevivieron y resistieron a la dictadura. También se abordaron diferentes experiencias, desde los múltiples orígenes, formatos, formas de escritura y miradas particulares de cada autor y autora.
Por medio de la poesía, y en un colmado Salón de Honor, se creó un ambiente de contemplación y escucha activa frente a los relatos y vivencias en torno a las violaciones de los derechos humanos, los crímenes sin resolver hasta hoy, y la búsqueda de la identidad, temas transversales sobre la vida en dictadura que han marcado la historia de la sociedad chilena en todos los ámbitos posibles.
“Hemos convocado a escritoras y escritores que han dejado testimonio en su poesía de los dolores y tragedias de la historia reciente en Chile”, dijo la vicerrectora de Extensión y Comunicaciones de la Universidad de Chile, Pilar Barba. “Abrir espacio para la cultura en esta conmemoración de los 50 años del golpe militar, nos parece fundamental. La literatura y las artes en su conjunto son una forma para pensarnos, para imaginarnos como sociedad, para hacernos preguntas y también para dejar huellas de los tiempos vividos”, continuó.
“Aunque en dictadura se intentó limitar la palabra, sacarla del espacio público y remitirla a lo privado, la poesía chilena no cayó. Por lo mismo, es uno de los repositorios de memoria más poderosos que tenemos en Chile. Hoy queremos darles la palabra y escuchar a poetas que, desde distintos lugares y generaciones, han dejado escrito un periodo de nuestro pasado que jamás debemos olvidar”, enfatizó.
Poesía como lugar de reflexión y memoria
La poeta Carmen Berenguer ofreció primero la lectura de un epígrafe y luego leyó La llorona chilena: “Lágrimas eternas de nuestra llorona chilena/ salió su rezo en lágrimas/ en todas las esquinas quedaban esos charcos de la lluvia de esas lágrimas / en los tres puntos cardinales se largaron las lágrimas por las ensenadas/ haciendo ríos en su búsqueda de su amante amor / ni un día en los 50 años que duró este tormento, ni un día dejo de llorar”.
Luego, la poeta y académica, Nadia Prado, quien dijo haber entrado por última vez a la Universidad de Chile junto a Las Yeguas del Apocalipsis en la performance de 1988, específicamente a la Facultad de Artes en Las Encinas, leyó pasajes de Animales Distantes. Asimismo, la poeta Soledad Fariña compartió versos inéditos de un nuevo proyecto en homenaje al ex Presidente Salvador Allende, que se publicará a través de la editorial de la Universidad de Santiago.
Posteriormente, la poeta y narradora, Daniela Catrileo, compartió una parte de Río Herido: “El secreto en la rotura / de la lengua / como quien se apuñala / a sí mismo/ para salvarse/ * / Mis muertos / no son la historia./ Caminan sin lengua aúllan/ como réplicas del signo./ ¿De qué sirve escribirte, si desapareces/ en la hoja / en el cauce?/ El eco que resuena al decir:/ es que estamos rotos/ como espiral/ de caracola al final del océano”.
Otra de las lecturas fue de Naín Nómez, quien compartió fragmentos de En el país del silencio, un poema que escribió pocos días después del golpe de Estado: «Cuando salí a mirar el sol el aire irrespirable / y los vecinos con los ojos atemorizados vigilaban las carreteras más cercanas / los teléfonos funcionaban de vez en cuando con monosílabos de espanto y mis amigos desaparecían uno a uno del dial / mientras los más sabios acordonaban sus órganos sexuales/ y se retiraban a sus madrigueras / seguros de que tarde o temprano el peso de la injusticia caería sobre ellos».
Otros de los versos que conmovió a los asistentes en el Salón de Honor estuvo a cargo del poeta Raúl Zurita: “Todo mi amor está aquí/ y se ha quedado: Pegado a las rocas, al mar y a las montañas”.
Así, este acto conmemorativo reunió los versos de primera fuente de las y los poetas Clemente Riedemann, poeta; Carmen Berenguer, poeta, cronista y artista visual; Manuel Silva Acevedo, poeta, Premio Nacional de Literatura 2016; Soledad Fariña, poeta, escritora y profesora; Raúl Zurita, Premio Nacional de Literatura (2000); Mirka Arriagada, poeta, psiquiatra y documentalista; Jaime Huenún, poeta y escritor; Naín Nómez, poeta y académico; Nadia Prado, poeta y académica; Francisco Véjar, poeta, antologador y crítico literario; Rosabetty Muñoz, poeta (que leyó pasajes de “Lejía” de forma virtual desde Edimburgo), Gustavo Becerra, poeta y realizador; Daniela Catrileo, poeta y narradora; Marcelo Velmar, poeta; Victoria Ramírez, poeta, periodista y editora; Jorge Montealegre, poeta, periodista y ensayista; Rodrigo Verdugo, poeta; Maribel Mora Curriao, poeta, profesora e investigadora mapuche; Andrés Ajens, poeta y traductor; Gabriela Morales, poeta, periodista y tallerista; Carlos Cociña, poeta y editor; Margarita Bustos, poeta, docente y gestora cultural; Isma Rivera, poeta, cantor y editor, y Eugenia Brito, poeta y crítica literaria.
En este encuentro participaron, además, la Rectora Rosa Devés; la Prorrectora Alejandra Mizala; el vicerrector de Asuntos Académicos, Claudio Pastenes; la vicerrectora de Asuntos Estudiantiles y Comunitarios, Josiane Bonnefoy, entre otras y otros invitados e integrantes de la comunidad.
El “Recital poético por el nunca más: Palabras para la memoria” sigue la línea de otras experiencias en la U. de Chile en que la poesía ha sido el lenguaje para situar una experiencia colectiva, reuniendo a representantes del campo poético contemporáneo con la comunidad universitaria y la sociedad. En 2016, se realizó el evento “11 poetas x el 11”, que contó con la participación de autoridades universitarias, estudiantes, funcionarias y funcionarios, quienes se reunieron junto a once poetas para recordar los 43 años del golpe de Estado. En 2020, en tanto, se realizó el recital “Resistencia poética contra la muerte”, donde en dos jornadas, poetas leyeron parte de su obra y piezas inéditas.
Este homenaje es parte de las actividades de la U. de Chile organizadas en el marco de la semana por el Nunca Más, que se desarrollará entre el 1 y el 11 de septiembre en su Casa Central. Entre ellas, destacan el Seminario Internacional “Chile a 50 años del golpe de Estado: Derechos humanos, Memoria y Democracia”, en el que participarán la ex Presidenta Michelle Bachelet y el representante regional en América del Sur de la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (ACNUDH), Jan Jarab; entre otras y otros. Toda la programación, que lleva por lema “Educación para la Democracia”, está disponible acá.
