Programa de acompañamiento U. de Chile apoya a vecinos de Macul

Compartir

Una vez a la semana, por cerca de una hora, a lo largo de tres meses, estudiantes de Psicología de la Universidad de Chile, conversan, escuchan y acompañan a personas con algún grado de discapacidad y a cuidadores/as de la comuna de Macul. Esta labor es parte de su práctica profesional, una iniciativa desarrollada en el marco de “Macul te acompaña”, programa de Acompañamiento Psicológico impulsado gracias a un convenio entre la Municipalidad de Macul y la Facultad de Ciencias Sociales de la Universidad de Chile. El espacio es una instancia de trabajo conjunto supervisada por el profesor Germán Rozas, coordinador del Programa de Estudios Comunitarios Latinoamericanos.

“El Programa de Estudios Comunitarios Latinoamericanos ha tenido siempre el planteamiento de tener un fuerte vínculo con la comunidad. Y, en el ámbito de trabajar con la comunidad del entorno, en la Facultad de Ciencias Sociales empezamos a trabajar hace unos 8 años con la Municipalidad de Macul en distintos espacios”, relata Rozas. Asimismo, el académico recalca que el objetivo es “poder colaborar con la comunidad, llevar un poco lo que sabemos, nuestras metodologías, conceptos, al mundo de la comunidad. Pero, al mismo tiempo, la idea es poder comprender a la comunidad, conocerla, saber cuáles son sus necesidades principales”.

Comprometidos con los vecinos

Scarlett Váldes y Javier Sánchez, estudiantes de Psicología de la Casa de Bello, han sido parte de las actividades que se realizan en esta zona de la Región Metropolitana. Ambos jóvenes, además, confeccionaron el subprograma de acompañamiento psicológico “No estás sol@”, el cual se pondrá prontamente en marcha y estará destinado a usuarios y usuarias del Programa de Discapacidad de la Municipalidad de Macul.

De esta forma, la nueva iniciativa dará apoyo a los vecinos, brindando contención emocional, reforzando su autoestima, fomentando la autonomía de las personas participantes y también contribuirá a la consolidación de sus redes de apoyo, y promoverá la participación social de cada uno de ellos y ellas.

“Empezamos en marzo (Macul te acompaña) y terminamos a mediados de junio, cuando empezamos a convocar a usuarios de prueba para que se insertaran en este subprograma. El trabajo que se realizó fue igual una experiencia nueva, en la que yo nunca había trabajado, desde esta área, de lo comunitario. Pero fue bastante acogedor, porque la cooperación dentro del equipo y el trabajo en equipo se fue reforzando y dio como resultado este subprograma de acompañamiento psicológico. Los documentos los realizamos para que esto existiera a largo plazo en el tiempo para futuros practicantes que deseen entrar al programa de discapacidad”, detalla Scarlett.

Por su parte, Javier –quien es parte del proyecto desde el año pasado- comenta que comenzaron “con un acompañamiento psicológico, de actividades comunitarias, pero ya a los dos o tres meses me di cuenta que había que contar con ciertos instrumentos, había que sistematizar un poco el trabajo, por lo menos, en el acompañamiento psicológico”. Agrega, además, que “hacia el final de la práctica, decidimos tener reuniones de inducción respecto a lo que habíamos hecho el año pasado. Lo que hemos intentado, en términos teóricos, es dar el giro de lo clínico a lo comunitario. Que esto no sea una terapia”.

Se proyecta en el tiempo

Alejandro Cartes, representante de la Dirección de Desarrollo Comunitario (Dideco) de la Municipalidad de Macul, quien ha estado vinculado al convenio, sostiene que “la primera iniciativa que tomamos con la U. de Chile fue iniciar un proceso de atención psicológica. Pero a poco andar nos dimos cuenta que era un proceso que no era sostenible en el tiempo, los estudiantes tenían muy poco tiempo para hacer la práctica, proceso muy interrumpido. Y así empezamos un proceso de reflexión donde fue vital la participación de Javier y Scarlett. También fuimos viendo qué alternativas teníamos a un proceso tan complejo, pero con recursos limitados”, indica Cartes.

En este contexto, nace el Programa de Acompañamiento Psicológico, que es un proceso que conecta lo individual con lo comunitario. «Parte por un proceso de primera acogida, de contención emocional, pero también la idea es poder conectar estas personas con otros, con otras y poder ir armando una red de apoyo, también a nivel comunitario”, explica.

El funcionario, por otra parte, destaca que la atención realizada por los estudiantes ha generado un impacto en la comunidad. “Las personas que participan han dado un salto cualitativo en la mejoría de su calidad de vida. Hoy día personas que estaban en su hogar, en una situación anímicamente muy desfavorable, hoy día son dirigentes comunitarias«. Además, plantea que «ese salto nos entusiasma mucho porque vemos una posibilidad de acción concreta y estratégica. Nos entusiasma también la posibilidad concreta en este círculo virtuoso que se da entre la municipalidad de Macul y la U de Chile, donde el plantel hace un aporte concreto a la dinámica comunitaria, y permite ir heredando excelentes profesionales. Por todos lados esta es una buena noticia y lo podemos proyectar incluso en el tiempo”, finaliza.


Prensa U. de Chile: Maritza Tapia. Fotos: Javier Sánchez – Alejandra Fuenzalida.