Orientado principalmente a profesores de historia y geografía de los liceos acompañados por la Casa de Bello, el curso preparado por el Instituto de Argumentación de la Facultad de Derecho y el Programa PACE UCH, busca apoyar la reflexión docente en torno al ramo de formación ciudadana, y con experiencias pedagógicas concretas, promover su implementación en la sala de clases.
Desde el 2019, a propósito de las Nuevas Bases Curriculares, Educación Ciudadana es un ramo obligatorio en la enseñanza media, que viene a reeditar la antigua clase de Educación Cívica, que se dejó de impartir en 1997. Sin embargo, a pesar de su importancia, los establecimientos educacionales se enfrentan al desafío de implementar esta nueva asignatura en el marco de la crisis sanitaria.
Para apoyar ese proceso surgió Educar en Ciudadanía, un curso a distancia con sesiones sincrónicas y asincrónicas de siete meses de duración, elaborado por el Instituto de Argumentación de la Facultad de Derecho y el Programa PACE UCH, como una instancia pedagógica de diálogo que le permita a los y las docentes de ciencias sociales adquirir herramientas didácticas para la implementación de la asignatura.
Para Fabián Retamal, coordinador de Enseñanza Media del Programa PACE de la Universidad de Chile, el curso está concebido para promover una ciudadanía activa de toda la comunidad escolar, en contextos que exigen esfuerzos adicionales para disminuir las brechas de equidad educativa.
“El aportar en la construcción de espacios de reflexión ciudadana era una necesidad que aparecía permanentemente en nuestro trabajo con los establecimientos educacionales, muy especialmente porque uno de lo sellos del PACE UCH, es entender las aulas como un lugar que debe ser crítico y reflexivo, donde docentes y estudiantes buscan y desean transformar su entorno”, indicó el profesional.
En este sentido, para Paulina Blanche, docente de Historia del Liceo Ciudad de Brasilia de Pudahuel, el curso se da en un momento clave, pues plantea la posibilidad de formar a los y las jóvenes en una educación ciudadana distinta «que genere en ellos y ellas un espíritu de acción y compromiso con su entorno y con los otros. Que los ponga en la vanguardia de las demandas sociales, políticas y económicas, pero con argumentos claros y profundos. Que los mueva en favor de lo colectivo y de lo público, que sean capaces de diferenciar las desigualdades y los comportamientos antidemocráticos”, afirma.
Claudia Díaz, asesora pedagógica del Programa PACE UCH, comenta que Educar en Ciudadanía fue concebido como una instancia para que los docentes de los liceos acompañados pudieran reflexionar en conjunto, establecer un trabajo vinculado con el fortalecimiento de habilidades en los estudiantes y promover una ciudadanía activa, reflexiva y critica, tanto en los estudiantes como en sus comunidades escolares.
«Espero que el curso sea una oportunidad para crear una comunidad de educadores que fomente el diálogo, el análisis, el conflicto, el pensamiento crítico y la creatividad al interior del aula. Aspiro a que los 20 docentes que estarán participando, sientan que este curso es un aporte a su labor cotidiana en el aula, y que tanto las actividades lectivas, el acompañamiento y los materiales que componen el curso sean adecuados para su trabajo», indicó.
Temáticas contingentes y atingentes
El curso se inició el 13 de mayo de 2020 con docentes de las asignaturas de historia, filosofía y arte de ocho establecimientos educacionales de siete comunas de la Región Metropolitana, de manera de intencionar el diálogo interdisciplinario y la posibilidad de trabajar didácticas entre diferentes asignaturas.
Para Rodrigo Valenzuela, profesor del Instituto de Argumentación de la Facultad de Derecho, el curso Educar en Ciudadanía aporta a la formación de los docentes especialmente en contextos de crisis. “El siglo XXI ha sido de crisis, esto es, de quiebres profundos que exigen redefinición de lo esencial, juicio prudente y acción colectiva. O sea quiebres que exigen excelencia política. No hay excelencia política sin ciudadanía politizada o, lo que es igual desde otra raíz, civilizada. La politización requiere una compleja pedagogía que lleve del reflejo a la reflexión, de la receta del técnico a la decisión prudente del agente moral, de la identidad tribal al pensamiento libre. Es el desafío que este curso busca trabajar”, señaló el profesor.
Para Ximena Oyarzo Rojas, profesora de Filosofía del Centro Educacional Valle Hermoso de Peñalolén, este curso es una oportunidad para «fortalecer la relación entre los diversos sujetos y la de éstos con los espacios comunes. Donde se pueda problematizar la idea de democracia en la misma escuela para proyectarla al resto de las dimensiones en que somos, y en las cuales deberíamos sentirnos libres de actuar desde nuestras diferencias y derechos”.
Para Cyntia Maciel, investigadora del Instituto de Argumentación y docente del curso, este programa busca incorporar una visión activa sobre el quehacer político. Tal labor, advierte, «requiere del trabajo de diversas habilidades en los y las docentes para que ellos puedan transferir esas mismas habilidades en sus estudiantes. Entre ellas destacamos un tipo de pensamiento que se enfoca en encontrar todas las perspectivas que importan a la comunidad frente a un problema y las diversas opciones en las que ese pensamiento puede transformarse en acción colectiva. Para ello trabajaremos aspectos narrativos, de síntesis y desempeño presencial que promueven el fortalecimiento una cultura de diálogo y empoderamiento de cada uno de sus participantes, lo cual constituye el sello del Instituto de Argumentación».
PACE UCH