Universidad de Chile lanza documento con orientaciones a la política de salud intercultural

Compartir
jcr_content

“Salud Intercultural en Chile: Recomendaciones para la política pública”, es el nombre del Policy Brief elaborado por integrantes de la Escuela de Salud Pública de la Universidad de Chile. El documento aborda las profundas inequidades de salud que enfrenta la población indígena en Chile, entregando recomendaciones para optimizar la normativa en gobernanza, marco regulatorio y pertinencia cultural entre el sistema de salud chileno y símiles indígenas.

Según las últimas cifras del Censo del Instituto Nacional de Estadísticas, existe un incremento en el porcentaje de personas pertenecientes a pueblos originarios, alcanzando un 12,8% de la población total. Frente a este escenario, el nuevo Policy Brief “Salud Intercultural en Chile: Recomendaciones para la política pública” sostiene que el aumento demográfico representa un importante desafío país, entendiendo la diversidad de características y sistemas propios que contempla cada pueblo.

En este sentido, a través de la firma de acuerdos internacionales como el Convenio 169 de la Organización Internacional del Trabajo, el Estado chileno se ha comprometido a proteger e incentivar los sistemas de salud indígenas. No obstante, pese a la implementación de políticas nacionales para atender la materia, el nuevo Policy Brief U. de Chile señala la prevalencia de un enfoque asistencialista, con baja consideración por la participación y conocimiento indígena.

En esta línea, el documento señala la ausencia datos actualizados que evidencien el perfil epidemiológico de los pueblos indígenas en Chile y de un diagnóstico de salud exhaustivo y diferenciado a nivel nacional, lo que se traduce en una relevante dificultad para la toma de decisiones en salud pública. A su vez, la falta de consideración se traduce en diferencias culturales, como la conceptualización del proceso salud-enfermedad, la hegemonía del modelo de salud occidental y el ejercicio de prácticas verticales dentro del sistema chileno.

Frente a este escenario, y a través de su rol público en la creación de conocimiento, integrantes de la Escuela de Salud Pública de la Facultad de Medicina U. de Chile elaboraron un documento de trabajo que problematiza sobre esta temática, enfatizando la necesidad de revisar la política de salud intercultural y realizando propuestas para mejorar la articulación entre el modelo de salud chileno y los indígenas.

El Policy Brief contó con el apoyo de la Vicerrectoría de Investigación y Desarrollo (VID) de la Universidad de Chile, a través de su Unidad de Transdisciplina, Redes e Interfaz y fue liderado por un grupo del Programa de Especialidad Médica ESP, compuesto por Alexis Delgado, Valentina Pantoja y Cristóbal Vacarezza. A esto se sumó un colectivo multidisciplinario de la Escuela de Salud Pública (ESP) compuesto por las y los académicos de la Facultad de Medicina, Pedro Crocco, Alejandra Fuentes-García, Marinella Mazzei y Cristian Rebolledo, además del académico del Instituto de Estudios Internacionales, Eduardo Carreño. También participó del escrito la académica de la Universidad Alberto Hurtado, Bárbara Bustos.

Ante esta iniciativa, la directora de Innovación de la Universidad de Chile, Anahí Urquiza, sostuvo que “el trabajo liderado por la Escuela de Salud Pública refleja el espíritu de la Universidad ante las diversas complejidades públicas que se enfrentan en la actualidad. En esta área, es de vital importancia poner nuestros esfuerzos en la articulación con las comunidades indígenas, relevando conocimientos y cultura de los pueblos, y aportando a la disminución de brechas en salud”.

Hallazgos y propuestas

A lo largo de sus páginas, el escrito destaca elementos asociados a la inequidad sanitaria. Entre ellos, se encuentra la desigualdad presente en indicadores epidemiológicos entre poblaciones indígenas y no indígenas, la falta de un diagnóstico actualizado sobre el estado de salud de estas comunidades y los desafíos de la implementación en la política intercultural, asociado a una falta de compromiso institucional y gobernanza adecuada.

Frente a esto, la académica de la Facultad de Medicina y una de las autoras del documento, Alejandra Fuentes-García, explicó que “a pesar de los avances normativos; las diferencias en los indicadores epidemiológicos, como la mortalidad infantil y general, así como la prevalencia de enfermedades transmisibles y no transmisibles, entre personas pertenecientes a pueblos indígenas y aquellas de pueblos no indígenas presentan persistentes y profundas inequidades. Estas inequidades reflejan no solo un déficit en la implementación de políticas públicas, sino también una falta de integración efectiva de las cosmovisiones y prácticas indígenas en el sistema de salud predominante en nuestro país”.

El residente del Programa de Especialidad Médica ESP y autor del documento, Cristóbal Vacarezza, también se refirió al tema, señalando que “Chile no ha logrado resolver esta brecha. Esto se traduce en una gobernanza que desconoce las formas de vida y salud indígenas, con consecuencias en una falta de adecuación cultural de los servicios sanitarios y un escaso reconocimiento y articulación con los sistemas sanitarios indígenas”.

Ante este escenario, el Policy Brief ofrece orientaciones para reducir las brechas sanitarias a través de la actualización del marco normativo, dotando a la salud intercultural de un marco institucional nuevo, que a la vez permita la modificación del código sanitario nacional. También, propone la formación en competencias culturales, incorporándolas en los programas de formación y mejorando la comunicación con las necesidades de salud indígenas.

Además, propone el desarrollo de centros de salud interculturales y una coordinación intersectorial en el área. En este sentido, la profesora Fuentes-García mencionó que “es importante fomentar la creación de centros de salud interculturales administrados por comunidades indígenas, especialmente en áreas rurales, para atender tanto las necesidades locales como las prioridades sanitarias de la medicina occidental. Además, es relevante establecer una instancia formal de coordinación intersectorial para trabajar en salud intercultural con ministerios y servicios públicos”.

Finalmente, Cristóbal Vacarezza, concluyó que “es importante reconocer y propiciar la mejor articulación entre sistemas sanitarios indígenas y su coexistencia con sistemas occidentales. En esta área, los centros de salud interculturales en atención primaria, administrados por comunidades indígenas y sus sanadores, han demostrado mejores indicadores en salud para su población, con mayor pertinencia y respeto cultural”.

Descarga gratuita del documento aquí. 

Comunicaciones VID